En ÓPTICA Alamedilla contamos con la experiencia y los conocimientos necesarios para realizar exámenes visuales a niños con pruebas adaptadas a cada edad.

CUÁNDO SE DEBE EVALUAR A UN NIÑO

Cuando los más pequeños de la casa están creciendo, no siempre es posible advertir problemas en su visión que pueden alterar su desarrollo. No todo empieza y acaba en las gafas… Nuestro hijo puede no necesitar corrección óptica y en cambio carecer de un sistema visual eficaz que le permita leer y estudiar de manera fluida.

Todos los niños deben ser examinados para determinar si existe una alteración en la visión que afecte a su eficacia visual: 

• A los 6 meses: se pueden evaluar los movimientos oculares, fijación, coordinación ojo mano, reflejos visuales y la salud ocular
• Entre 1 y 2 años: se revisa la coordinación entre ambos ojos, y si hay un estrabismo u ojo vago.
• A los 3 años: ya suelen colaborar y se puede medir la agudeza visual y la visión en 3D, y si necesitan llevar gafas.
• A los 5 años: antes de empezar a leer hay que asegurarse de que el sistema visual está preparado. La convergencia, acomodación, movimientos oculares y visión en 3D deben alcanzar valores óptimos.
• En primaria: es importante evaluar las áreas de percepción visual y procesamiento de la información visual que puede interferir en el proceso de aprendizaje.

Se estima que un 30% del fracaso escolar lleva asociado problemas de visión (trastornos en el área de eficacia visual y/o procesamiento de la información visual) 

SIGNOS Y SÍNTOMAS QUE NOS ALERTAN DE UN PROBLEMA VISUAL

• Acercarse demasiado a la hoja al leer o escribir
• Posturas raras o realizar gestos con la cara o guiñar cuando realiza actividades visuales.
• Tener problemas al copiar correctamente de la pizarra.

SIGNOS Y SÍNTOMAS QUE NOS ALERTAN DE UN PROBLEMA VISUAL

• Estrabismos: cuando los ejes visuales no se encuentran alineados, se produce una desviación de los ojos. La mayoría de los estrabismos aparecen en la edad infantil y producen otras alteraciones visuales como ojo vago. El estrabismo puede ser corregido con gafas, oclusiones, terapia visual, toxina, cirugía, o con frecuencia, con una combinación de tratamientos.
• Ambliopía (Ojo vago): es una condición que ocurre por la falta de una estimulación visual correcta durante el desarrollo y que no puede mejorarse solo con corrección óptica. Existen tres tipos de factores que lo producen: errores refractivos altos que no han sido corregidos o errores refractivos de diferentes cuantías en cada ojo, estrabismos de un solo ojo y enfermedades oculares como cataratas congénitas o ptosis palpebral.

Es importante detectar estos problemas en la etapa infantil ya que, si bien pueden ser tratados a cualquier edad, su recuperación tiene mejor pronóstico en edades tempranas donde la plasticidad cerebral es mayor.